lunes, 20 de septiembre de 2010

virilidad y amistad sincera

a veces la amistad es extraña entre dos hombres, por supuestísimo, no quepa duda, dicho quede, "indudablemente" heteros. no es lo mismo ser camarada ni polizón a bordo de una tripulación de bandidos. ni se comparan los compañeros de armas, ni de gobierno, ni los enemigos, ni los buenos vecinos. ni es lo mismo el que juega al fútbol contigo todas las semanas, o al que bebe y vomita a tu lado entre dos coches los domingos de madrugada. hablo de sentir cariño, fraternal, hacia otro ser con pene que no es tu hermano. es, como, no sé, como ese tipo de relaciones que da pie a situaciones que, vistas desde fuera, están fuera de renglón y avergonzarían a cualquier macho acostumbrado a cargar al hombro con su escroto.

una de intestinos

aunque masticas para que otro trague y cague y llene el mundo de mierdas perfumadas, tú picas piedra en el desierto cantando una canción sobre alguien al que amaste y le revientas el glande a la amargura. hoy eres mi héroe o heroína... ¿quién coño inventó el género de los sentimientos? ¿quién fue el que marcó mi piel para desear la tuya? lo importante es que ahí estás, como un faro, dándome ansia de vida como el olor del óvulo a un espermatozoide, como una puerta entreabierta a un preso.